¿Navegas conmigo?

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lunes, 7 de noviembre de 2011

Señora...


Señora, la mirada la tiene usted cansada, fija y vacía... ¿ Que ha podido pasar en su vida para encontrarse con tal soledad y tristeza?

Señora, Usted fue una total luchadora en la vida, por los suyos, por su persona, defendiendo contra viento y marea, ¿ Que es lo que le quito esa fuerza que le caracterizaba? ¿Donde dejo Usted las ilusiones? ¿Cuando fue la ultima vez que sonrió... ?

Señora, sepa que el tiempo es oro y se que como tal usted lo aprovecho, lo dio todo, tanto y a tantos que mire usted, fijese bien por favor, no se deje ganar ahora, siga hasta el final, piense, que siempre hay alguien que se detenga a admirarla, porque usted es una historia hecha realidad, es un monumento sin aplausos, pero con muchos seguidores, usted es algo mas que un artista cuando se abre el telón, usted señora no es noticia, porque nadie la conoce, pero déjeme decirle que hoy alguien escribe por y para usted, para que todo el mundo sepa, que fue una gran señora, guapa, artista en lo personal y grande en lo sentimental, yo le miro y me detengo ante usted y le aplaudo.
No tengo pena al verla porque esta llena de una vida cargada de buenos frutos, cansada por el tiempo, pero con sus deberes bien hechos como habitante de este mundo y como ser humano... Sobresaliente señora.

Tomo nota de su mirada, porque aunque no me quiera hablar, su mirada habla por si sola y transmite toda una vida y eso merece todos mis respeto, por eso... señora, me detengo ante usted, me quito el sombrero, ese que ni llevo puesto y me rodillo ante usted, para transmitirle mi mas profundo respeto y admiracion, por haber sido, por ser y por lo que sera sea cual sea su destino... señora, sepa que aunque la gente pasen de largo, se que cuando paren a pensar, tendrán un momento para acordarse de usted y de su mirada.

Señora, reciba usted el Homenaje que merece, aunque nadie la conozca y el aplauso de todo el mundo que hoy sabe que usted existió, luchó y vivió.

Mañana quizás, cuando vuelva a pasar por aquí, usted ya no este, pero estoy seguro que alguien la llevara al trono que merece una Reina y madre.

Reciba usted mi cariño y respeto.